
Mañana, tarde, noche. Pamela tenía el horario a disposición. Jugueteaba conmigo y con mi pobre humanidad adolescente. Carecía de escrúpulos. Pamela enseñaba que el sexo era sexo. Pamela iba y se venía. Creaba un universo donde las estrellas tenían sexualidad permanente.
Pamela y su boca. Pamela y su culo tremendo que nos enloquecía.
Arte de manicure, soledad entre las solas.
Dónde andarás, Pamela. Se acordará que me hizo crecer?
3 comentarios:
ALGUNA PARTE DEL CUERPO. DE A RATOS?
AY.PERDON
sisisisi, ésta!!!!
je
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